REPLICAS EN GUERRERO

Señoras y señores, en Chile, Michelle Bachelet, presidenta de este país, ha declarado la zona norte de la república como “zona de desastre”, luego del sismo de 8.3 grados en escala de Richter, que reportó el Centro Sismológico de la Universidad de Chile.

Y que aunque el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por sus siglas en inglés) señaló que fue de 8.2, lo cierto es que genero olas de tsunamis de hasta 2.13 metros en Iquique y de 1.80 metros que se reportaron este pasado martes uno de abril cerca de las costas de Pisagua, esto según el Centro de Alertas de estos fenómenos naturales.

Lo que llegó a provocar alertas en las costas de Perú, y las mexicanas como Chiapas y Guerrero, donde afortunadamente sólo se ha presentado un fuerte oleaje en la “Costa Chica” guerrerense, y nada más permanece como advertencia, así como en la isla de Hawái, pues, otra vez, la USGS ha indicado que se han registrado al menos 12 réplicas entre los 6.2  y 5.2 grados Richter.

Por ello la mandataria chilena, en su mensaje a la nación desde el Palacio de la Moneda, dijo que además de trasladarse a las zonas afectadas para coordinar en las tareas de ayuda, lo hace también para evitar “la rapiña”, y reiteró que “el país ha podido enfrentar este tipo de contingencia” por lo que pidió mantener la calma.

Esto también en clara alusión del pasado terremoto de 8.8 grados que literalmente derrumbó a Chile el 27 de febrero de 2010, uno de los más fuertes en toda la historia de la nación suramericana y que causó la muerte de más de 500 personas, dejó 2 millones de damnificados y un millón y medio de viviendas afectadas, con un tsunami que afectó varias ciudades.

Hoy por hoy sólo se han reportado hasta el momento oficialmente 5 personas fallecidas (1 mujer y 4 hombres), dos por causa de infartos al miocardio y 3 lamentablemente aplastados; empero, el punto de vista positivo de la tragedia, es que cada vez sigue existiendo una mejor cultura en zonas de alto riesgo.

Convirtiéndose a la vez en un fuerte llamado para países como Ecuador, Colombia, Panamá y por supuesto México; pues pese a que el epicentro se registró a 89 kilómetros al suroeste de la región de Cuya, y con una profundidad de 10 kilómetros, no deja de ser otro aviso de la naturaleza que nos invita a estar siempre alertas.

Casi para terminar, recordemos que en 1973 la embajada de México rompió relaciones diplomáticas con Chile, luego que se instauró la dictadura militar del nefasto Pinochet, provocando que los mexicanos que en aquella época residían en esta zona (no más de 37 familias) tuvieran que realizar sus trámites por medio de la embajada venezolana.

Para 1984 se estableció por primera vez la Asociación de mexicanos en Chile (www.mexicanos.cl), cuya principal misión es vincular a la comunidad residente en esa nación por medio de diferentes actividades que mantenga viva la cultura y tradiciones mexicanas, además de su difusión en nuestro país.

Finalmente en 1990, luego de 17 años y con el retorno de tiempos más democráticos donde algunos amigos chilenos afirman que es mejor el voto obligatorio que las segundas vueltas; México reanudó las relaciones diplomáticas. Actualmente la colonia residente de mexicanos alcanza las casi 2 mil personas según el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Empero, pese a que es pequeña y heterogénea (en su mayoría empresarios, intelectuales, artistas o deportistas, gente de manufactura, labores domésticas, en restaurantes y otros), su capacidad de organización es grande y permanentemente están trabajando altruistamente en bien de toda su nueva comunidad. Infografía: CNN en Español Comentarios www.noesegurasalazar.blogspot.mx