MARCHAS

Señoras y señores, en un México de 120 millones de personas, hoy, una problemática enmarcada en una reforma educativa, que se inclinó a la inseguridad, hoy por hoy repercute internacionalmente, “las expresiones fueron diversas, el sentido el mismo. Un pueblo, un reclamo. Justicia”.

Un México donde aunque hay poblaciones sin luz, donde no todos tenemos un ordenador, mucho menos internet, cuentas de redes sociales, ni celulares inteligentes que cronican los diferentes puntos geométricos del planeta, hoy provocan la caída de un gobernante, que ha probado mucha miel, pero hoy prueba el trago amargo.

Angel Heladio Aguirre Rivero, hoy sucumbe, no ante la tecnología que deja al desnudo las diferentes clases de cacicazgos con los que gobernaron gente como Santanna o Porfirio Díaz; aunque hay que ser claros su caída tampoco resuelve ni el asunto de Iguala, ni el rezago de Guerrero.

Es sólo una vendetta de esa ramplona clase política que se niega a desaparecer, pero que ahora le toca a Aguirre salir por la puerta de atrás, así como el llegó por primera vez a la gubernatura; pues lamentablemente hoy Guerrero ni siquiera está listo para afrontar esta nueva crisis de turismo y elecciones que se vendrá en los próximos meses, pues, hoy subirse a un autobús definitivamente tiene otro contexto.

Si algo podemos rescatar de todas estas manifestaciones, es que sigue habiendo un “alma colectiva”, el respeto a la vida y un reclamo de miles de años, el respeto a la ley que rige nuestra vida gregaria; empero al igual a lo mejor nada más una catarsis del México de vestido folklórico, el México de las pasamontañas, el México de traje de vestir, que se unió no para festejar un partido de futbol, sino gritar su rabia, su indignidad.

Un helicóptero sustituye a las camionetas blindadas, una huida hacia el sur, mientras la corrupta clase política del PRI y PRD no dejan de hacer campaña, como si nada hubiese pasado, Armando Rios, Sofio Ramírez, Beatriz Mujica, Cuauhtémoc Salgado; para ellos sólo existe eso de que “muera el rey, ¡viva el rey!”, el jefazo dice a dios, pero ya se asoma el que sigue.

De Tlapa a Nueva York ya no nada más viajan los paisanos migrantes, también las inconformidades contra un alcalde nefasto como Victoriano Wences Real , que finalmente se ha convertido en uno de ellos, camionetas de lujo, propiedades, golpea a jóvenes y periodistas, en fin, traicionando a las siglas de un partido que le brindó su confianza.

Ahora la clase política devuelve una de cal por las que van de arena, la presión internacional ha creado una atmosfera tan densa que ahora nos preguntamos ¿dentro de esta aldea global verdaderamente dejará un precedente contra la corrupción? O pasará a ser tan efímero o fugaz como un “hastag” que sólo se puso de moda. Sólo el tiempo lo dirá. Foto: 24 HORAS Comentarios: www.noesegurasalazar.blogspot.mx