domingo, 12 de octubre de 2014



“DIA DE LA RAZA”

Señoras y señoras, nada más como referencia de los tiempos “modernos”, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) entró en vigor desde 1976, cabe señalar que México ha sido omiso en el cabal cumplimiento de este y muchos más –algo que per se deberíamos vivirlo-, puesto que no ha habido la decisión política y la gobernabilidad; como consecuencia, el país experimenta una etapa de pobreza muy dura y violencia.

Hoy día la vemos exacerbada hasta la barbarie, con una población preponderantemente analfabeta, es evidente que con una política pública asistencialista proyectada para los años 70´s y mal implementada en estos días que estamos montados en la globalización y la manipulación por medio de la masificación, mezcla un coctel desastroso.

Es más que evidente que la “estrategia” gubernamental de “desarrollo” ha dejado la actividad económica nacional a merced de las poderosas fuerzas de un mercado internacional con muchas más desventajas y por eso es que a 522 años de la invención de América y la conquista española, las oportunidades para los mexicanos de hoy estén sumamente limitadas.

Independientemente de la mescolanza de la sangre española, el sistema de cacicazgo sigue estando vigente en sociedades de extrema pobreza como Guerrero, pues a Angel Heladio Aguirre Rivero nunca le interesó lograr acuerdos políticos con la sociedad civil, bajo la sombra de la fuerza más retrograda del PRD, es más, fue más codicioso que cuando lo fue por primera vez con el PRI.

Sin profundizar a Max Weber, la sociedad ya no es la misma, los segmentos más pobres de la población crecieron en número y en proporción demográfica, polarizando aun más a la sociedad guerrerense, que además de su factor multiétnico, había que seguirle sumando lo generacional, la guerrilla y el narcotráfico.

Ni siquiera fue capaza de tener una estrategia de política pública, el nepotismo, el despilfarro y a la vez, no atender a la parte “moderna”, lo ha hecho sucumbir ante las redes sociales y los medios alternativos, nacionales e internacionales de información y comunicación, llevándolo al despeñadero en materia política, con un discurso de puras vaciladas y hasta de locura.

Los bajos ingresos de la población mayormente indígena y de las minorías, sin capacidad adquisitiva, sin calidad de vida, de subempleo y lo peor, el desempleo, están chocando como placas tectónicas de hace tiempo, pero Aguirre Rivero, desde su cacicazgo se encarga de meterle día con día más leña al fuego y hasta gasolina.

Acompañado de una clase política de “pipa y guante”, camionetas de lujo blindadas y guaruras que no permiten el acercamiento a la población, con mansiones y servidumbre que se les explotan en los bacanales y que están terminando de desquebrajar la de por sí desigual pirámide de las clases sociales; dicen en el argot periodístico que una imagen habla más que mil palabras; esa “bonita familia de gente bien”, de compromisos con el narcotráfico, que lo han llevado a la omisión y la complicidad.

Así las cosas, a 522 años del genocidio, el país se nos ha ido de las manos, necesitamos una brújula para “la democracia”, pues no podemos hablar de democracia sino resolvemos los problemas de seguridad y pobreza. Hoy por hoy vivimos momentos aciagos de exclusión, fragmentación y de integración, un país que firma el acuerdo para enviar “cascos azules”, pero que recibe como respuesta de la ONU que si no resuelve este problema de los 43 normalistas desaparecidos, ellos mandaran los “cascos azules” a Iguala.


Que alguien le diga a Angel Aguirre –que no sea un “opino tecnócrata”-, que su administración sigue siendo constitucional pero ya no legitima, que perdió el mando y el rumbo, la capacidad de diálogo, de negociación  y lo peor, la dignidad; pues aunque los cacicazgos españoles lamentablemente siguen practicándose en el país y toda América, el es víctima de un gobierno dictatorial al que el perteneció y que lo hiso “a la antigüita”. Foto: Internet Comentarios: www.noesegurasalazar.blogspot.mx

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