martes, 12 de mayo de 2015

Sopa de Letras A la tinta de Noé Segura Salazar. NUTRICION Señoras y señores, hoy en día la nutrición se ha vuelto un tema que va de la satisfacción de sentirse bien, hasta un auténtico dolor de cabeza, las dietas en estos momentos de crisis parecen no tener cabida, pues para comer sano se tiene que calcular horarios y aprender a ser su propio chef, sino tiene la posibilidad de ir a caros restaurantes que le venden una ensalada verde al triple. Ir al mercado implica dedicarle un buen tiempo, así que lo más recomendable es que vaya usted un día domingo y trate que todas las verduras se mantengan frescas lo más posible, a esto hay que agregarle arreglárselas para poder practicar algún deporte por lo menos 30 minutos, tres días de la semana, reitero, como mínimo, al “aire libre” –que no sea cerca del Huacapa-, si tampoco tenemos para el gimnasio de moda. Sin dejar de contar las horas y días para ir a consulta por algunas vitaminas, y ver al nutriólogo, el cual le dará otra lista de lo que no puede comer y de cómo el ingenio tiene que salir a flote para poder darle variedad a las “3” comidas principales y dos “colaciones” entre ellas, si su bolsillo tiene algo más que aire. Todo esto puede sonar caótico, pero si su agenda se lo permite hay una sola cosa que lo puede sacar a flote y no amargarse ni tomar otra ruta que lo lleve al desenfreno y mantener niveles saludables, en estos momentos, en que como todos podemos observar, la obesidad es una epidemia que se está registrando desde edades cada vez más cortas en nuestro seno familiar. Dicen los que saben, los que hablan bonito y un tipuchal de gente –que son los más promiscuos a darnos recetas para todo y de todo-, que debemos demostrar voluntad de hacerlo para no hacerlo por “fuerza de voluntad y lo peor por la fuerza”, pues sobre todo cuando se carga una enfermedad crónico degenerativa como la diabetes mellitus, la cosa se va complicando literalmente segundo a segundo. Para cuando usted este leyendo estas líneas ya debieron haber pasado mínimamente como cuatro actividades importantes, medirse la glucosa muy de temprano, hacer la activación física, asearse correctamente, luego tomar los medicamentos suscritos por su médico con la disciplina y medidas de asepsia necesarias, el desayuno a tiempo y finalmente el chequeo para poder ver como dentro de las próximas horas se las arreglará para cumplir con sus obligaciones laborales y no apartarse del rigor médico. No hay de otra, entre gota y gota, capsula y capsula y el acostumbrar el cuerpo a la sustitución de alimentos no debe dejar de trabajar, pues hay una realidad, cada vez son más los jóvenes –que por lo regular no tienen empleo- y la población –que personalmente me auto califico como raquítica-económicamente activa-, que cuenta con una chamba, tiene que juntar para sus equipos de cuidado personal (glucómetros, checadores de presión arterial, cortaúñas, etc.), análisis clínicos, material médico como jeringas, alcohol, algodón y parole de contar, pues no terminaríamos ni con la ropa interior, cremas, y pedir hasta incapacidades debido a los trastornos alimenticios que llevamos de años. Hoy ver gente en motocicletas o en coches –de lujo o simplemente para desarrollar la vida cotidiana como el servicio urbano-, que les cuesta maniobrar o simplemente amarrase las agujetas ya no es cosa de gracia ni mal chiste en las redes sociales; la realidad es que nosotros y nuestros niñ@s con los bocadillos y golosinas antes y al final de la oficina o escuela deben estar bajo mucha observancia, pues con los segundos los padres de familia, somos los principales responsables de que no tengamos una buena nutrición. Comentarios: www.noesegurasalazar.blogspot.mx

No hay comentarios:

Publicar un comentario